Desde que estoy con mi actual pareja, nos han pasado algunas cosas que antes nunca me habían ocurrido. Siempre que había estado con un hombre nunca había tenido ningún problema en ponerse cachondo y mantener la erección, pero en este caso, necesita mucha estimulación para tener una erección, llegando a bajarse incluso algunas veces cuando estamos en pleno acto. Intento entender que cada persona tiene un nivel de excitación diferente, y pensaba que podía entender este caso, pero me estoy dando cuenta que me afecta más de lo que pienso. Necesito saber si esto es normal, si hay más personas a las que le ocurre, y si existe alguna forma de solucionar en la medida de lo posible esta situación, o si simplemente es normal, y no hay nada que solucionar.
Efectivamente, cada persona es diferente y la forma en la que sienten deseo y se excitan varía de un hombre a otro: algunos necesitan más estimulación física y/o mental que otros, unas determinadas circunstancias ambientales o personales, un vínculo de pareja determinado… Voy a enumerarte algunas de las posibles causas por las que un hombre puede tener dificultades para conseguir y mantener una erección:
- Consumo de sustancias: el alcohol y las drogas pueden ser contraproducentes a la hora de mantener relaciones sexuales. Aunque, por un lado, desinhiben y facilitan el encuentro sexual, por otro lado dificultan la consecución y el mantenimiento de las erecciones -y también, del orgasmo.
- Medicamentos: algunos medicamentos pueden interferir en el mecanismo de erección del pene. Es importante leer bien el prospecto de las medicinas y consultar al médico para conocer los posibles efectos adversos que puedan tener en este terreno.
Preocupación, ansiedad, estrés y cansancio: llegar a la cama preocupados, ansiosos, estresados y/o cansados hace que no estemos receptivos a la estimulación sexual, que no disfrutemos, que no nos concentremos en las sensaciones y en lo que está ocurriendo en el momento. No sólo la mente está en otro sitio sino que, además, el cuerpo está tenso y, por tanto, la estimulacion que se le haga no va a ser muy efectiva a nivel sexual.
- Comprobación: si un hombre está muy pendiente del estado de su erección (de si está dura o no, de si está lo suficientemente dura, de si se “baja” un poco, etc.) lo que provoca al final es desviar su atención de las sensaciones placenteras y de su pareja y aumentar la ansiedad con la que vive el encuentro sexual. De esta forma, lo que consigue es precisamente lo contrario a lo que pretende: la erección se dificulta e, incluso, se pierde
- Falta de desinhibición: si durante el encuentro sexual el hombre se siente poco cómodo, tímido, vergonzoso, acomplejado, miedoso etc., no se relajará, no se dejará llevar por las sensaciones y, por tanto, sus erecciones no serán plenas
- Falta de deseo: la falta de deseo es otro motivo para las erecciones dificultosas, ya sea debida a la falta de atracción, a un momento vital de poco o menos deseo sexual del habitual, al cansancio, a las preocupaciones o a cualquier otra causa
- Necesidad de un vínculo afectivo: algunos hombres, para excitarse adecuadamente y tener una erección, necesitan tener un vínculo afectivo con su pareja más fuerte y estable que otros. Sin este vínculo afectivo pueden no conseguir relajarse y excitarse adecuadamente para tener una erección. Este vínculo afectivo puede estar formado por la confianza, el amor, la intimidad, el cariño, el compromiso, etc.
- Nueva pareja: a veces, cuando un hombre cambia de pareja sexual o sentimental puede tener dificultades para conseguir y/o mantener una erección. Esto puede deberse, por un lado, a los motivos que comentamos en el punto anterior de la necesidad de un vínculo afectivo. Otros hombres, a veces, experimentan un miedo a establecer un compromiso sentimental que les bloquea sexualmente hablando. Otros, por otro lado, pueden sentir que están traicionando a su anterior pareja al acostarse con otra y, por tanto, sentir una culpa o ansiedad que les dificulta la concentración y las erecciones.
- Necesidad de una estimulación diferente o mayor: no a todos nos gustan las mismas cosas ni de la misma forma. Algunas personas necesitan una estimulación física más fuerte o más suave, más intensa o más leve, más rápida o más lenta… Otros necesitan una estimulación mental más potente: usar fantasías, recrear situaciones eróticas, rodearse de un ambiente estimulante… Si la estimulación que está recibiendo una persona no es la adecuada a su gusto y necesidades puede no excitarse lo suficiente y, en el caso de los hombres, no conseguir una erección o perderla
Desconozco los motivos por los que a tu pareja le cuesta conseguir y mantener las erecciones. ¿Le has preguntado desde cuándo le ocurre esto o si tiene alguna idea de por qué le ocurre? En función de la causa la forma de solucionarlo será una u otra. En la consulta se tratan estas dificultades y los resultados son muy buenos.
Desde luego, no es el primero ni el último hombre al que le ocurren estas cosas. Es algo muy frecuente y para nada “anormal”. Algunos hombres no le dan la menor importancia a esta situación, pero otros prefieren cambiarla; eso depende de la relevancia que le de cada uno.
¡Espero haberte aclarado un poco tus dudas! Sin hablar con él no puedo conocer los motivos por los que esto le ocurre ni planificar una solución -en caso de ser necesaria. No sé dónde vivís; yo tengo consulta en Madrid por si queréis pasaros y me contáis en persona. Te dejo mi número de teléfono: +34 669.006.839 por si os animáis.
Un saludo!