No me gusta que me hagan sexo oral. Causas
- El miedo al olor de sus genitales: algunas personas creen que el sus genitales huelen mal y, por eso, prefieren que sus parejas no se acerquen ahí, pues temen que les de asco y las rechacen. Es cierto que los genitales tienen un olor particular y diferente al del resto del cuerpo pero, si están limpios, ¡no hay problema!
- La creencia de que los geniales son algo sucio: la educación, la moral, los tabúes… promueven la idea de que el pene y la vulva son algo sucio e impuro. Si crees esto, difícilmente vas a querer que tu pareja acerque su boca ahí. Pero los geniales son sucios ¡solo cuando no están limpios!
- No permiten que les den placer: A algunas personas les cuesta dejarse llevar y permitir que su pareja les de placer. Creen que deben ser ellos los que le de placer a sus parejas y se sienten incómodos cuando los papeles se invierten y no es así. No saben dejarse cuidad y mimar y se sienten egoístas e incómodos. Pueden pensar que están fallando a su pareja, que se están aprovechando de ella, que no se merecen que les den placer, que son ellos los que deben dar placer a su pareja para que les quieran, que su pareja está practicándole sexo oral obligada…
- Creen que es una práctica impropia para su pareja: hay quien considera que hacer sexo oral es algo sucio, inmoral, arrastrado, de bajo nivel… incluso pecaminoso. Si crees eso, no quieres que tu pareja lo haga y la proteges negándote a ello. El sexo oral es como cualquier otra práctica sexual, ni más ni menos, y no tiene nada de arrastrada, ni de inmoral ni nada por el estilo. Disfrutar el cuerpo es sano y, por tanto, ¡el sexo oral también lo es!
Miedo a contraer una infección de transmisión sexual: algunas personas creen que, si les practican sexo oral, pueden contraer una ITS. Lo cierto es que la única manera en la que hay riesgo de contagio cuando te hacen sexo oral es si tu pareja tiene un herpes o una herida abierta en la boca; sino, no hay riesgo. Sí que corre riesgo la persona que hace el sexo oral, pero no quien lo recibe.
- No sienten placer: algunas personas no sienten placer con el sexo oral, pues la presión que notan es insuficiente, la velocidad, la profundidad… o simplemente encuentran otras prácticas más satisfactorias que esta
Soluciones
Si a tu pareja no le gusta que le hagas sexo oral es importante que la respetes y aceptes su decisión. Si quieres animarla, puedes decirle que a ti te encantaría hacérselo, que lo disfrutarías y que te excitaría. También puedes sugerirle que se duche y se asee antes, para que se sienta más cómodo/a y limpio/a. Otro truco es el de usar lubricantes de sabores, pues enmascaran el sabor natural de los genitales. También puedes decirle que lea este artículo para que comprenda mejor la situación. Por otro lado, puedes preguntarle si tu técnica es inadecuada, si le gustaría más si se lo hicieses de otra manera o si podrías mejorar en algo para que sintiese más placer. También podéis usar preservativos, tanto el femenino como el masculino, para protegeros y quedaros más tranquilos. Pero si aun así no quiere… ¡no presiones! Cada uno es libre de tomar sus decisiones respecto a la sexualidad ¡y respecto a cualquier cosa!
En mi consulta se trabajan estos temas y se ayuda a que la gente viva su sexualidad de una manera más libre, sana y satisfactoria, quitando mitos, tabúes y reeducando la vida sexual. Esto ayuda, entre otras cosas, a disfrutar del sexo oral.